ALZHEIMER
El Alzheimer
es una enfermedad neurológica progresiva e irreversible que afecta al cerebro produciendo la
muerte de neuronas, es la causa más frecuente de todas las demencias produciendo un deterioro significativo de las funciones cognitivas
CAUSAS
Usted es más propenso a padecer el mal de
Alzheimer si:
• la edad es más frecuente en adultos mayores . Sin
embargo, sufrir esta enfermedad no es parte del envejecimiento normal.
•Tener un pariente consanguíneo cercano, como un hermano, hermana
o padre con la enfermedad.
•Tener ciertos genes
ligados al mal de Alzheimer como
el alelo APOE epsilon4.
Los siguientes factores pueden aumentar el
riesgo, aunque no están bien comprobados:
•Pertenecer al sexo femenino
•Tener presión arterial alta por mucho tiempo
•Antecedentes de traumatismo craneal
Existen
dos tipos
de mal de Alzheimer:
•En el mal de Alzheimer de aparición temprana, los síntomas
aparecen primero antes de los 60 años y es mucho menos común que el de
aparición tardía; sin embargo, tiende a empeorar rápidamente. La enfermedad de
aparición temprana puede ser hereditaria y ya se han identificado varios genes.
•El mal de Alzheimer de aparición tardía, la forma más común
de la enfermedad, se presenta en personas de 60 años en adelante. Puede ser
hereditario, pero el papel de los genes es menos claro.
Ya no se cree que el aluminio, el plomo y el
mercurio en el cerebro sean una causa del mal de Alzheimer.
SÍNTOMAS
Los
síntomas de Alzheimer abarcan dificultad con muchas áreas de la
función mental, entre ellas:
• Comportamiento emocional o la personalidad
•El lenguaje
•La memoria
•La percepción
•El pensamiento y el juicio (habilidades cognitivas)
El Alzheimer aparece primero generalmente
como olvido.
Los
síntomas del deterioro cognitivo leve abarcan:
•Dificultad para realizar más de una tarea a la vez
•Dificultad para resolver problemas
•Olvidar hechos o conversaciones recientes
•Tardar más tiempo para llevar a cabo actividades más difíciles
Los
síntomas tempranos del mal de Alzheimer pueden abarcar:
•Dificultad para realizar tareas que exigen pensar un poco, pero
que solían ser fáciles, tales como llevar el saldo de la chequera, participar
en juegos (como bridge) y aprender nueva información o rutinas
•Perderse en rutas familiares
•Problemas del lenguaje, como tener dificultad para encontrar el
nombre de objetos familiares
•Perder interés en cosas que previamente disfrutaba, estado
anímico indiferente
•Extraviar artículos
•Cambios de personalidad y pérdida de habilidades sociales
A
medida que el mal de Alzheimer empeora, los síntomas son más obvios e
interfieren con la capacidad para cuidar de sí mismo. Los síntomas pueden
abarcar:
•Cambio en los patrones de sueño, despertarse con frecuencia por la
noche
•Tener delirios, depresión, agitación
•Dificultad para realizar tareas básicas, como preparar las
comidas, escoger la ropa apropiada o conducir
•Dificultad para leer o escribir
•Olvidar detalles acerca de hechos cotidianos
•Olvidar hechos de la historia de su propia vida, perder la noción de
quién es
•Alucinaciones, discusiones, comportamiento violento y dar golpes
•Deficiente capacidad de discernimiento y pérdida de la capacidad para
reconocer el peligro
•Uso de palabras erróneas, no pronunciar las palabras correctamente,
hablar con frases confusas
•Retraerse del contacto social
Las personas con mal de Alzheimer avanzado ya no
pueden:
•Entender el lenguaje
•Reconocer a los miembros de la familia
•Llevar a cabo actividades básicas de la vida diaria, como comer,
vestirse y bañarse
Otros síntomas que pueden presentarse con el
mal de Alzheimer:
•Incontinencia
•Problemas para deglutir
PRUEBAS Y EXÁMENES
Un médico entrenado a menudo puede diagnosticar
el mal de Alzheimer con los siguientes pasos:
•Examen físico completo, que incluye examen neurológico
•Hacer preguntas acerca de la historia clínica y los
síntomas
•Un examen del estado mental
El diagnóstico de esta enfermedad se hace
cuando ciertos síntomas están presentes y verificando que otras causas de
demencia no estén presentes.
Se pueden realizar exámenes para descartar otras
posibles causas del Alzheimer
entre ellas:
•Anemia
•Tumor cerebral
•Infección crónica
•Intoxicación por medicamentos
•Depresión severa
•Accidente cerebrovascular
•Enfermedad de la tiroides
•Deficiencia vitamínica
La tomografía computarizada (TC) o la resonancia magnética (RM) del cerebro se puede hacer para
buscar otras causas de Alzheimer, como tumor cerebral o accidente
cerebrovascular.
•En las etapas tempranas del Alzheimer, la imagen cerebral en las
gammagrafías puede ser normal. En etapas posteriores, una resonancia magnética puede mostrar una disminución
del tamaño de diferentes áreas del cerebro.
•Aunque estos exámenes no confirman el
diagnóstico de Alzheimer, sí excluyen otras causas de Alzheimer (como accidentes
cerebrovasculares y tumor).
Sin embargo, la única forma de saber con certeza que alguien
sufrió el mal de Alzheimer es
examinar una muestra de tejido cerebral después de la muerte. Los siguientes cambios son más comunes en el
tejido cerebral de personas con Alzheimer:
•"Nudos neurofibrilares" (fragmentos enrollados
de proteína dentro de las neuronas que obstruyen la célula).
•"Placas neuríticas" (aglomeraciones anormales
de células nerviosas muertas y que están muriendo, otras células cerebrales y
proteína).
•"Placas seniles" (áreas donde se han acumulado
productos de neuronas muertas alrededor de proteínas).
TRATAMIENTO
No existe
cura para la
enfermedad de Alzheimer. Los
objetivos del tratamiento son:
•Disminuir el progreso de la enfermedad (aunque esto es difícil
de hacer).
•Manejar los síntomas como problemas de comportamiento, confusión
y problemas del sueño.
•Modificar el ambiente del hogar para que usted pueda desempeñar
mejor las actividades diarias.
•Apoyar a los miembros de la familia y otros cuidadores.
TRATAMIENTO FARMACOLÓGICO:
Los medicamentos se emplean para ayudar a
disminuir la tasa a la cual los síntomas empeoran. El beneficio de estos
fármacos con frecuencia es pequeño y usted y su familia no siempre pueden notar
mucho cambio.
Antes de usar estos medicamentos, pregúntele
al médico o al personal de enfermería:
• ¿Cuáles son los efectos secundarios
potenciales del medicamento y vale la pena el riesgo?
• ¿Cuándo es el mejor momento, si lo hay,
para usar estos fármacos?
LOS MEDICAMENTOS PARA EL MAL DE ALZHEIMER ABARCAN:
•Donepezil (Aricept), rivastigmina (Exelon) y galantamina (Razadyne, antiguamente llamado Reminyl).
Los efectos secundarios
abarcan malestar
estomacal, diarrea, vómitos, calambres musculares y fatiga.
•La memantina (Namenda). Los posibles efectos secundarios abarcan agitación o ansiedad.
Se pueden requerir otros medicamentos para controlar
comportamientos agresivos, agitados o peligrosos. Algunos ejemplos son
el haloperidol, la
risperidona y la quetiapina. Generalmente, se administran en dosis muy
bajas, debido al riesgo de efectos secundarios que incluyen un mayor riesgo de
muerte.
Puede ser necesario suspender medicamentos
que empeoran la confusión, como analgésicos, cimetidina, depresores del sistema
nervioso, antihistamínicos, pastillas para dormir y otros. Sin embargo, nunca
cambie ni deje de tomar los medicamentos sin hablar primero con el médico.
PRONÓSTICO
La
rapidez con la cual empeora esta enfermedad es diferente para cada persona.
Si el mal de Alzheimer se presenta súbitamente, es más probable que empeore con
rapidez.
Los
pacientes con mal de Alzheimer con frecuencia mueren
antes de lo normal, aunque un paciente puede vivir entre 3 y 20 años después del diagnóstico.
La
última fase de la enfermedad puede durar desde unos meses hasta varios años. Durante
ese tiempo, el paciente se torna totalmente inválido. La muerte por lo regular
ocurre por una infección o una insuficiencia orgánica.
POSIBLES COMPLICACIONES
•Maltrato por parte de un cuidador demasiado estresado
•Úlceras por decúbito
•Pérdida del funcionamiento muscular que imposibilita mover las
articulaciones
•Infecciones, como infecciones urinarias y neumonía
Otras complicaciones relacionadas con la
inmovilidad
•Caídas y fracturas
•Comportamiento dañino o violento hacia sí mismo o hacia los otros
•Pérdida
de la capacidad para desempeñarse o cuidarse
•Pérdida
de la capacidad para interactuar
•Desnutrición
y deshidratación
PREVENCIÓN
Aunque no existe una forma comprobada de
prevenir el mal de Alzheimer, existen algunas prácticas que vale la pena
incorporar en la rutina diaria, particularmente si usted tiene antecedentes
familiares con Alzheimer. Hable con el médico acerca de cualquiera de estas
propuestas, especialmente aquellas que implican tomar medicamentos o suplementos.
•Consumir una dieta baja en grasa.
•Consumir pescado de agua fría (como atún, salmón y caballa) rico en ácidos grasos omega-3,
al menos dos a tres veces a la semana.
•Reducir la ingesta de ácido linoleico que se encuentra en las
margarinas, la mantequilla y los productos lácteos.
•Incrementar los antioxidantes, como los carotenoides, la vitamina E y la vitamina C,
consumiendo muchas frutas y verduras de color oscuro.
•Mantener una presión arterial normal.
•Permanecer activo mental y socialmente durante toda la vida.
•Pensar en tomar antinflamatorios no
esteroides (AINES), como ibuprofeno (Advil, Motrin), sulindaco (Clinoril) o
indometacina (Indocin). Las drogas estatinas, un tipo de medicamento
normalmente usado para el colesterol alto, pueden ayudar a disminuir el riesgo
del mal de Alzheimer. Sin embargo, hable con el médico acerca de los pros y
contras de la utilización de estos medicamentos para la prevención.
ALZHEIMER
ALZHEIMER
Versión impresa ISSN 0120-5307
Invest.
educ.enferm v.26 n.1 Medellín ene./jun. 2008
INVESTIGACIÓN
Autovaloración de calidad de vida y envejecimiento
en adultos con riesgo de Alzheimer
Self-assessment
of quality of life and aging of Alzheimer development risk adults
María del
Carmen Zea Herrerab; María Elizabeth López Alzatec;
Claudia Marcela Valencia Marínd; Juliana Andrea Soto Gómeze;
Daniel Camilo Aguirre Acevedof; Francisco Lopera Restrepog;
Wolf D. Oswaldh; Roland Rupprechti
b)
Enfermera, Especialista en Rehabilitación. Estudiante de Doctorado en
Gerontología Social Universidad de Granada – España. Profesora Facultad de
Enfermaría, Universidad de Antioquia. Grupo de Investigación La Práctica de
Enfermería en el Contexto Social. Correo electrónico: carmenzea@tone.udea.edu.co
c) Gerontóloga, Magíster en Gerontología Interdisciplinaria y estudiante de doctorado en el Instituto de Psicogerontología de la Universidad Erlangen-Nürnberg-Alemania. Grupo de Neurociencias de Antioquia. Correo electrónico: elizabeth.lopez@neurociencias.udea.edu.co
d) Psicóloga, Universidad de Antioquia. Grupo de Neurociencias de Antioquia. Correo electrónico: claudia.valencia@neurociencias.udea.edu.co
e) Enfermera, Universidad de Antioquia. julianitasogo@yahoo.com
f) Estadístico, Magíster en Epidemiología Universidad de Antioquia. Grupo de Neurociencias de Antioquia. Correo electrónico: camilo.aguirre@neurociencias.udea.edu.co
g) Médico, Neurólogo, Licencia especial en Neuropediatría y Neuropsicología. Profesor Facultad de Medicina Universidad de Antioquia. Coordinador Grupo de Neurociencias de Antioquia. Correo electrónico: francisco.lopera@neurociencias.udea.edu.co
h) Psicólogo, Doctor en Economía y Ciencias Sociales. Profesor del Instituto de Psicogerontología, Universidad Erlangen-Nürnberg, Alemania. Correo electrónico: forschung@wdoswald.de
i) Psicólogo, Doctor en Filosofía. Profesor del Instituto de Psicogerontología, Universidad Erlangen-Nürnberg, Alemania. Correo electrónico: rupprecht@geronto.uni-erlangen.de
c) Gerontóloga, Magíster en Gerontología Interdisciplinaria y estudiante de doctorado en el Instituto de Psicogerontología de la Universidad Erlangen-Nürnberg-Alemania. Grupo de Neurociencias de Antioquia. Correo electrónico: elizabeth.lopez@neurociencias.udea.edu.co
d) Psicóloga, Universidad de Antioquia. Grupo de Neurociencias de Antioquia. Correo electrónico: claudia.valencia@neurociencias.udea.edu.co
e) Enfermera, Universidad de Antioquia. julianitasogo@yahoo.com
f) Estadístico, Magíster en Epidemiología Universidad de Antioquia. Grupo de Neurociencias de Antioquia. Correo electrónico: camilo.aguirre@neurociencias.udea.edu.co
g) Médico, Neurólogo, Licencia especial en Neuropediatría y Neuropsicología. Profesor Facultad de Medicina Universidad de Antioquia. Coordinador Grupo de Neurociencias de Antioquia. Correo electrónico: francisco.lopera@neurociencias.udea.edu.co
h) Psicólogo, Doctor en Economía y Ciencias Sociales. Profesor del Instituto de Psicogerontología, Universidad Erlangen-Nürnberg, Alemania. Correo electrónico: forschung@wdoswald.de
i) Psicólogo, Doctor en Filosofía. Profesor del Instituto de Psicogerontología, Universidad Erlangen-Nürnberg, Alemania. Correo electrónico: rupprecht@geronto.uni-erlangen.de
Cómo
citar este artículo: Zea
Herrera M, López Alzate ME, Valencia Marín CM, Soto Gómez JA, Aguirre Acevedo
DC, Lopera Restrepo F, Oswald O, Rupprecht R. Autovaloración de calidad de vida
y envejecimiento en adultos con riesgo de Alzheimer. Invest Educ Enferm. 2008;
26(1): 24-35.
RESUMEN
Objetivo: describir la autovaloración de
calidad de vida y del envejecimiento de tres grupos: adultos portadores y no
portadores de la mutación E280A en el gen de la Presenilina 1 para Enfermedad
de Alzheimer Familiar Precoz, y adultos mayores, en Antioquia-Colombia, estudio
realizado entre enero de 2005 y junio de 2007.
Metodología: estudio descriptivo transversal donde participaron 162 personas asintomáticas en riesgo de desarrollar Enfermedad de Alzheimer como consecuencia genética o del proceso de envejecimiento, quienes se subdividieron en tres grupos: 27 portadores, 39 no portadores y 96 adultos mayores. Investigación realizada en el Grupo de Neurociencias de la Universidad de Antioquia (Medellín) y en el Centro Gerontológico Atardecer (Envigado). Se analizaron las características sociodemográficas, y se aplicaron pruebas para la autovaloración de la calidad de vida global del envejecimiento: World Health Organization Quality of Life y la Nürnberg -Self-Evaluation-List respectivamente. Análisis estadístico: Se describieron los grupos y se compararon frente a las variables de estudio utilizando el análisis de varianza no paramétrico de Kruskall Wallis y la prueba U de Mann-Whitney.
Resultados: las calificaciones medias de los instrumentos para la autovaloración de calidad de vida y global del envejecimiento en los tres grupos de participantes, fueron superiores a 50 puntos e inferiores a 55 puntos respectivamente.
Conclusiones: los adultos mayores se autovaloran con menor calidad de vida que los portadores y los no portadores, especialmente en el área de salud física, al igual que en la percepción del envejecimiento, a pesar de las condiciones de los portadores, aunque, en general, todos los grupos las puntuaron bien.
Metodología: estudio descriptivo transversal donde participaron 162 personas asintomáticas en riesgo de desarrollar Enfermedad de Alzheimer como consecuencia genética o del proceso de envejecimiento, quienes se subdividieron en tres grupos: 27 portadores, 39 no portadores y 96 adultos mayores. Investigación realizada en el Grupo de Neurociencias de la Universidad de Antioquia (Medellín) y en el Centro Gerontológico Atardecer (Envigado). Se analizaron las características sociodemográficas, y se aplicaron pruebas para la autovaloración de la calidad de vida global del envejecimiento: World Health Organization Quality of Life y la Nürnberg -Self-Evaluation-List respectivamente. Análisis estadístico: Se describieron los grupos y se compararon frente a las variables de estudio utilizando el análisis de varianza no paramétrico de Kruskall Wallis y la prueba U de Mann-Whitney.
Resultados: las calificaciones medias de los instrumentos para la autovaloración de calidad de vida y global del envejecimiento en los tres grupos de participantes, fueron superiores a 50 puntos e inferiores a 55 puntos respectivamente.
Conclusiones: los adultos mayores se autovaloran con menor calidad de vida que los portadores y los no portadores, especialmente en el área de salud física, al igual que en la percepción del envejecimiento, a pesar de las condiciones de los portadores, aunque, en general, todos los grupos las puntuaron bien.
Palabras
Clave:
autovaloración, calidad de vida, envejecimiento, enfermedad de Alzheimer
ABSTRACT
Objective: describe the self assessment of
the quality of life and the aging of a group of middle-age adult carriers and
non-carriers of mutation E280A in gene Presenilin 1 for Early Onset Familial
Alzheimer’s Disease and of elderly adults in Antioquia- Colombia. Study
conducted from January 2005 to June 2007.
Methodology: descriptive transversal study in which 162 asymptomatic people at risk of developing Alzheimer’s disease as a genetic consequence or as a consequence of the process of aging. They were subdivided into three groups: 27 carriers of the mutation, 39 non-carriers and 96 elderly adults. The study was conducted at the Neuroscience Group in Medellín (Antioquia) and at a gerontology center in Envigado (Antioquia) named Atardecer. Social-demographic characteristics were analyzed and quality of life and overall aging selfassessment tests were applied, which included the World Health Organization Quality of Life, and the Nürnberg -Self-Evaluation-List respectively. Statistic Analysis: The groups were described and they were compared to the variables of the study using Kruskall Wallis non-parametric anova and Mann-Whitney’s U-test.
Results: the mean scores of the instruments to assess quality of life and overall aging of three groups of participants were above 50 points and below 55 points respectively.
Conclusions: elderly adults assessed themselves as having a lower quality of life than carriers and non-carriers, especially in the physical health area, and in their perception of aging, in spite of carriers’ conditions, although in general the scores were good in all the groups.
Methodology: descriptive transversal study in which 162 asymptomatic people at risk of developing Alzheimer’s disease as a genetic consequence or as a consequence of the process of aging. They were subdivided into three groups: 27 carriers of the mutation, 39 non-carriers and 96 elderly adults. The study was conducted at the Neuroscience Group in Medellín (Antioquia) and at a gerontology center in Envigado (Antioquia) named Atardecer. Social-demographic characteristics were analyzed and quality of life and overall aging selfassessment tests were applied, which included the World Health Organization Quality of Life, and the Nürnberg -Self-Evaluation-List respectively. Statistic Analysis: The groups were described and they were compared to the variables of the study using Kruskall Wallis non-parametric anova and Mann-Whitney’s U-test.
Results: the mean scores of the instruments to assess quality of life and overall aging of three groups of participants were above 50 points and below 55 points respectively.
Conclusions: elderly adults assessed themselves as having a lower quality of life than carriers and non-carriers, especially in the physical health area, and in their perception of aging, in spite of carriers’ conditions, although in general the scores were good in all the groups.
Key words: self-assessment, quality of
life, aging, Alzheimer’s disease
INTRODUCCIÓN
En el mundo, muchos estudios realizados evalúan la
calidad de vida (CV) y la percepción del
envejecimiento en personas adultas y en poblaciones con enfermedades crónicas:
cáncer, demencias, enfermedades cardíacas, renales, neurológicas, transplantes,
entre otras, para medir el impacto o efectividad de las intervenciones
terapéuticas, farmacológicas y/o quirúrgicas y la satisfacción con la vida en
general de éstas1, 2. También universalmente se está dando un cambio en la pirámide
poblacional con un aumento de la población adulta mayor y, en consecuencia, el incremento de enfermedades
asociadas con la edad avanzada, entre las más comunes las neurodegenerativas
como la Enfermedad de Alzheimer (EA), que se considera la primera causa
de demencia; se calcula que cerca de 24 millones de personas la sufren
actualmente y se estima que para el año 2040 esta cifra aumentará a 81 millones3.
En
Colombia, teniendo en cuenta sus condiciones políticas, socioeconómicas y de
salud, se requiere explorar no sólo los elementos objetivos de CV y del
envejecimiento, sino también los factores subjetivos que puedan autovalorar las
personas, en nuestro caso asintomáticas para la EA, pero vulnerables a
desarrollarla, bien sea por factor de riesgo genético o por la edad avanzada,
ya que son pocos los estudios que se han reportado respecto del tema.
La CV en el país se identifica por medio de los
estudios económicos y se
asocia con conceptos de pobreza, desnutrición, infraconsumo, bajos niveles
educativos, inserción inestable en la producción, condiciones sanitarias y
habitacionales precarias; se confunde con niveles, condiciones o estilos de
vida y se reduce a cifras, indicadores, porcentajes y estadísticas de cómo vive
la gente, de la satisfacción de sus necesidades básicas, las cuales se miden en
términos físicos: vivienda, servicios públicos o área construida, y otros.
Afortunadamente,
la CV es un concepto que
empieza a incluirse en los documentos públicos; es así como para nuestro
país, en un manuscrito preliminar de políticas de envejecimiento y vejez para
el periodo 2007-2019, se incluye la directriz de la OMS, “Envejecimiento activo: proceso
por el cual se optimizan las oportunidades de bienestar físico, social y mental
durante toda la vida, con el objetivo de ampliar la esperanza de vida
saludable, la productividad y la calidad de vida en la vejez”; además la
CV se incluye en el objetivo general que habla de “prevenir, mitigar y superar
las condiciones sociales, culturales y económicas que impacten en forma
negativa la calidad de vida de la población adulta mayor (…)” y en el Eje 2 de
Protección Social Integral, para “ orientar la disminución de la vulnerabilidad
y mejorar la calidad de vida de los colombianos (…)”4.
Según
datos de la Organización de Naciones Unidas (ONU)5, la población de adultos
mayores en Colombia va también en aumento. En el año 2000, el porcentaje
poblacional de este grupo etáreo fue de 6.8%, y se estima para el 2025 un
incremento que alcance el 12.8%. Este crecimiento de población envejeciente
debe constituirse en prioridad para el abordaje investigativo, asistencial y el
desarrollo de estudios que permitan conocer los determinantes de la calidad de
vida y del envejecimiento desde la perspectiva de la autovaloración que cada
persona hace de las situaciones vividas en la interacción con su entorno.
En el
departamento de Antioquia, Colombia, se ha detectado el grupo poblacional más
grande del mundo con una forma hereditaria de Enfermedad de Alzheimer Familiar
Precoz (EAFP), asociada a la mutación E280A en el gen de la Presenilina 1 (PS1)
en el cromosoma 14, identificada por el Grupo de Neurociencias de Antioquia6.
La mayoría de los estudios reportados hasta el momento, se han centrado en la
identificación de parámetros objetivos de evaluación, diagnóstico e
intervención de la enfermedad y de los pacientes afectados. Sin embargo, no se
han estudiado los aspectos subjetivos como la autovaloración de la calidad de
vida y del envejecimiento, factores importantes para comprender las
problemáticas particulares de estas personas y de sus grupos familiares.
Tanto las
personas portadoras como las no portadoras de la mutación E280A en la PS1 para
desarrollar EAFP, han tenido que convivir con esta problemática de generación
en generación, ya que sus parientes la han padecido, y más aún cuando se
enferman a una edad tan temprana como los 32 años7. Además, se suman
a estas situaciones familiares y ambientales, las de tipo personal y
socioeconómico, las cuales se manifiestan en la mayoría de los miembros sanos
en el temor a enfermar como sus abuelos, padres y/o hermanos, es decir, que la
enfermedad no la sufre sólo la persona afectada, sino que pasa a ser un
padecimiento familiar y social estigmatizante8- 10.
Calidad
de vida: La CV ha sido un concepto bastante investigado en la literatura
mundial11, pero aún no se ha podido lograr un criterio claro que lo
unifique, debido a la complejidad de los términos y de las variables
interrelacionadas que se involucran en ellos; definir y delimitar el concepto
de CV es difícil por la falta de unidad terminológica que presentan las
diferentes investigaciones. Ejemplo de ello es que en la literatura hispana,
cuando se habla de calidad de vida, se designan conceptos como: estar bien y
contento, tener felicidad, salud, bienestar, felicidad subjetiva, placer,
bienestar económico y social.
Diversos
autores coinciden en afirmar que la CV es una noción imprecisa, amorfa, múltiple,
multidimensional12 y bipolar, pues tiene componentes subjetivos y
objetivos13-14. Los componentes o dimensiones subjetivas de la CV
indican la percepción que tienen las personas según sus propias características
personales, necesidades, satisfacciones, aspiraciones, expectativas y escalas
de valores de aspectos del entorno y de las condiciones globales de vida, como
por ejemplo, los servicios sociales, de salud y de apoyo social, que se
traducen en sentimientos positivos o negativos. Los componentes objetivos de la
calidad de vida pueden ser medidos independientemente de los sentimientos, como
los recursos económicos, la disponibilidad de servicios sociales y de salud, la
calidad ambiental, los recursos familiares, las incapacidades funcionales y la
enfermedad con signos y síntomas, que, aunque son parte del sujeto, es posible
describirlos objetivamente2, 15.
No hay
duda de que la CV ha sido
una aspiración de los seres humanos en todos los tiempos, pero su imprecisión
conceptual desde la objetividad y subjetividad, hacen que estas dimensiones se
valoren de manera diferente de persona a persona; por eso, en muchos
casos, ni el consumismo ni la opulencia social significan calidad de vida, como
tampoco el bienestar material y el económico coinciden con el bienestar
subjetivo, de satisfacción con la vida o el sentimiento de felicidad16.
Algunas definiciones conceptuales de CV
La Organización Mundial de la Salud (OMS), en 1994, definió
la CV como:
“Percepción personal de un
individuo de su situación de vida, dentro del contexto cultural y valores en
que vive, en relación con sus objetivos, expectativas, valores e intereses”17,
mientras la ONU18, en 1991, plantea los principios a favor de las
personas de edad y cinco ámbitos de trabajo: independencia, participación,
atención, realización personal y dignidad.
Algunos
autores describen la CV
como la “sucesión
de hechos o efectos que tienen como consecuencia un sentimiento de satisfacción
o de felicidad con la vida y consigo mismo”19; otros indican que la
CV “constituye un proceso socioeconómico, cultural y sociopsicológico de
producción de valores referentes a la calidad (bien-estar) de nuestra vida
social, de distribución social de estos mismos valores y de percepción social
de los valores por la población”20, y que la satisfacción de las
necesidades de la especie humana transcurre en situaciones dinámicas,
variables, transitorias según la estructura social y es lo que condiciona lo
que llamamos CV y ésta es, a su vez, el fundamento concreto del concepto de
bienestar social20. Por tanto, la CV no es un estado sino un proceso
dinámico, un fenómeno social, que no debe confundirse con el nivel de vida, ni
con el desarrollo económico y social de los pueblos21, sino que debe
incluir como uno de sus parámetros de medición, la felicidad autopercibida, o
bien la satisfacción vital experimentada y es allí a donde se deben dirigir las
acciones que los diferentes profesionales realizan en el sector de salud y
educación, pues se ha demostrado que “las puntuaciones subjetivas de bienestar
y salud explican mejor la variación en las puntuaciones de calidad de vida que
los indicadores objetivos económicos o sociodemográficos”22.
Uno de
los modelos clásicos de CV utilizado en varios estudios es el esquema de
evolución del concepto de Felce y Perry23, que tiene cuatro
concepciones: CV definida como la calidad de las condiciones de vida
(componente objetivo); como satisfacción personal con las condiciones de vida
(componente subjetivo); como la combinación de las dos anteriores; y como la combinación
de las condiciones de vida y satisfacción, ponderadas por la escala de valores,
aspiraciones y expectativas de cada persona15, 24.
La CV es parte esencial en el desarrollo de una
sociedad; este
concepto se ha relacionado con el consumo de bienes y se ha usado con
frecuencia en diversos ámbitos como: salud, educación, economía, política, y en
el mundo de los servicios en general25.
En
resumen, asumimos la CV como
el resultado de un proceso individual de
valoración de muchas dimensiones que interactúan entre la persona y su entorno,
que abarcan tanto
condiciones de vida objetivas como subjetivas, dentro de las cuales se
encuentran las normas sociales, las valoraciones personales y los factores
afectivos. La valoración de un individuo tiene que ver, en gran parte,
con la situación actual de vida, con la evaluación del pasado y con las
expectativas para el futuro26.
Adultos mayores y cambios del envejecimiento
La adultez es una etapa del ciclo vital humano, que puede clasificarse en
adultez joven, media o madura y mayor27. El envejecimiento es un proceso evolutivo normal,
universal, acumulativo e irreversible, constituido por componentes físicos,
psíquicos, sociales, culturales y ambientales.
Es la suma de todos los cambios que se producen en
el ser humano con el paso del tiempo, que conducen a un deterioro del
funcionamiento en general y a la muerte. También ha sido considerado como una etapa de mayor vulnerabilidad,
ya que disminuyen las probabilidades de supervivencia y la capacidad de reserva
del individuo. Dicho proceso está determinado por el envejecimiento normal, la
enfermedad y el desuso de funciones y capacidades. Es importante considerar que no todos los cambios
funcionales del envejecimiento son enfermedad28- 29,
ya que envejecer es algo
tan natural como el paso del tiempo y se trata de una etapa30
o estado21 de
la vida de la persona. La OMS31 conceptualiza al anciano
solamente por la edad y el grado de desarrollo del país, proponiendo para los
países desarrollados un límite de 65 años o más y para países en desarrollo 60
años o más.
El
envejecimiento, como proceso multifactorial, incluye una variedad de cambios
que pueden ser considerados por los adultos mayores en un grado de
significancia de menor o mayor severidad, según su autovaloración de CV. Los cambios biológicos incluyen
los referentes a la apariencia física, por ejemplo, las canas, las
arrugas y el estado de salud32, éste último es uno de los conceptos
cuya valoración tiene un mayor significado en la CV; por tanto, cuando ellos perciben
deterioro físico y/o funcional, pueden manifestar pesimismo o angustia de
padecer alguna enfermedad asociada al envejecimiento. La CV en relación con la
salud (CVRS), se ha convertido en un tema importante para la investigación
médica en las últimas décadas, por considerar la percepción del paciente, sus
deseos y motivaciones para la toma de decisiones en salud y para la evaluación
de la asistencia sanitaria33. Entre los temas más significativos
para evaluar la independencia y la calidad de vida en los adultos mayores,
están los relacionados con dolores crónicos, trastornos psiquiátricos,
demencias, así como los daños corporales y mentales34.
A nivel psicológico, el envejecimiento se asocia a
menudo con una disminución de la capacidad en el rendimiento cognitivo y, con ello, a una lentitud del
pensamiento o baja velocidad en el procesamiento de la información17,
35-36.
Adultos en riesgo de desarrollar EA familiar
Las demencias son afecciones que generan gran nivel
de dependencia en la población adulta, y dado que la EAFP por mutación E280A en la PS1,
se presenta en edades tempranas, 45 años en promedio, se perturba severamente
el funcionamiento físico, mental, social, económico y familiar en una etapa del
ciclo vital aún productiva, lo que origina problemáticas individuales y
grupales considerables37- 38.
Cabe
señalar como una razón de gran preocupación, la condición de que en el
departamento de Antioquia se haya identificado el grupo poblacional más grande
del mundo con una forma de EAFP, el cual está conformado por unas veintidós
genealogías extensas con más de 5.000 herederos, lo que significa que, por las
características de transmisión de la enfermedad, autosómica dominante con una
penetrancia del 100%, todas aquellas personas que sean portadoras de dicha
mutación, sufran inexorablemente la enfermedad, si logran sobrevivir hasta la
década de los 50 años6.
La memoria es una de las funciones más importantes y una de sus características más
diferenciales, pues en ella se alojan señas de identidad, biografía, recuerdos
del pasado, y cuyo deterioro conlleva a alteraciones en el estilo de vida,
dificultades de adaptación a la cotidianidad, presencia de ansiedad, depresión
y baja autoestima, cambios que amenazan la satisfacción y el bienestar a lo
largo de la vida y que afectan el sentido de individualidad y autonomía,
función que es dramáticamente afectada en la EA17,39. Además se
agrega que la enfermedad no tiene cura; generalmente los tratamientos y
cuidados que retrasan el deterioro cognitivo son asumidos por los familiares y
cuidadores del enfermo, quienes presentan condiciones de pobreza económica o de
suelos, bajos niveles educativos, baja cobertura en salud10, dado
que los contenidos de los planes obligatorios de salud vigentes tienen una
escasa cobertura en la atención de la salud mental, pues nuestro sistema de
salud no está preparado para asumir el manejo requerido en estos casos. La persona enferma de este mal
pierde gradualmente su capacidad de elegir, responder por sus actos y expresar
la propia libertad; sus cuidadores trabajan hasta por más de diez años
acompañando a su pariente con inmenso sacrificio10, 40.
Las personas que sufren entre otros, trastornos neurológicos y mentales como el
deterioro cognitivo, tienen peor calidad de vida que las que no los sufren22.
La importancia del trabajo interdisciplinar
Para mantener la CV de los grupos vulnerables a
desarrollar EA, es fundamental la visión integradora y el aporte comprometido
del equipo interdisciplinario; así por ejemplo, neurología debe velar por hacer diagnósticos y
tratamientos apropiados, estabilizar aquellos estadios de la enfermedad que
deterioran la calidad de vida de los afectados por la degeneración del cerebro
y del sistema nervioso, el psicólogo hace un seguimiento del deterioro cognitivo
con su respectivo acompañamiento, el gerontólogo vela por su mantenimiento
biopsicosocial y el del entorno, mientras que el papel de enfermería es
esencial para procurar un equilibrio entre el enfermo, el cuidador y los
profesionales de la salud; esta labor sobrepasa las fronteras del simple
cuidado corporal, del dolor o del sufrimiento por una enfermedad, y va al
entendimiento del concepto de autocuidado tanto para el propio enfermo como
para el cuidador. Algunas de las
actividades de enfermería con personas vulnerables a desarrollar EA se
relacionan con la búsqueda de la calidad de vida, la conservación de la
independencia por el mayor tiempo posible, el conocimiento de las inquietudes
que de la enfermedad tienen las personas enfermas y sus familias frente a la
satisfacción de sus necesidades y dificultades concretas, basados en las
capacidades reales, el ofrecimiento de mecanismos para equilibrar las
deficiencias presentadas por el deterioro, la orientación terapeútica, legal,
institucional y otras que puedan requerir. Sólo si fusionamos el cuidado, la
educación y el afecto, la enfermedad se convertirá en un proceso más llevadero
para todos los implicados.
MATERIALES Y MÉTODOS
Este es
un estudio descriptivo
transversal, realizado entre enero de 2005 y junio 2007. Las personas
seleccionadas participaron en la investigación: “Evaluación de un programa de estimulación cognitiva para
población en riesgo de Alzheimer y adultos mayores”, de la que se deriva
este artículo, que buscaba identificar los efectos de un método combinado de
estimulación cognitiva y psicomotriz (SIMA®), sobre tres grupos
poblacionales y sus respectivos grupos controles: portadores de la mutación
E280A en la PS1, y no portadores inscritos en las investigaciones desarrolladas
por el Grupo de Neurociencias de la Universidad de Antioquia, y finalmente,
adultos mayores que conformaban grupos de la tercera edad de algunas sedes de
Comfenalco de la ciudad de Medellín y del Centro Gerontológico “Atardecer” del
municipio de Envigado. Los participantes asistieron al estudio voluntariamente
y dejaron firmado su consentimiento; la aplicación del programa de
entrenamiento no implicaba procedimientos invasivos, ni riesgos adicionales
para ellos.
En total se evaluaron 250 personas por neurología y
neuropsicología y sólo
se seleccionaron quienes cumplieron con los siguientes criterios de inclusión:
1) Tener resultados de la prueba genética para mutación E280A de la PS1 (sólo
para las personas pertenecientes al grupo de EA familiar), 2) No haber tenido
antecedentes de enfermedad neurológica o psiquiátrica, 3) No cumplir criterios
del DSM-IV (American Psychiatric Association, 1994) para el diagnóstico de
demencia, 4) Edad entre 30 y 60 años para los portadores y no portadores y
entre 60 y 85 para los adultos mayores y 5) Escolaridad igual o superior a 3º
de primaria.
Los
criterios de exclusión fueron: 1) Minimental inferior a 2341, 2)
Quejas de Memoria (QP) superior o igual a 19, 3) Puntuación mayor a 2 tanto en
la Escala de Deterioro Global (EDG) como en FAST (Functional Assessment
Staging)42 y 4) Puntuación mayor a 5 en la Escala Geriátrica de
Depresión de Yesavage43.
Finalmente,
para el análisis del objetivo de autovaloración de calidad de vida y
envejecimiento, participaron 162 personas, las cuales se subdividieron en tres
grupos: 1) 27 portadores de la mutación E280A en la PS1, 2) 39 no portadores y
3) 96 adultos mayores, quienes diligenciaron de manera individual los
instrumentos. La evaluación fue realizada al inicio del estudio, en la fase previa
al entrenamiento del programa combinado de estimulación cognitiva y psicomotriz
SIMA®.
Instrumentos
1. WHOQOL-BREF (World Health
Organization Quality of Life): Versión abreviada del original
WHOQOL-100, creado por la OMS en 1996. Es un instrumento transcultural, aplicado en
múltiples poblaciones de diferentes idiomas, el cual produce un perfil de la CV según la propia
percepción de la persona evaluada. El instrumento abreviado ha
demostrado validez y confiabilidad en una correlación de 0.9 con respecto a la
versión original y tiene diferentes usos: la práctica clínica, la investigación
epidemiológica, la planificación de políticas nuevas y la evaluación de los
servicios de salud. Consta de 26 preguntas o facetas que hacen referencia
temporalmente a las dos últimas semanas, cada una con 5 posibilidades de
respuesta (1 a 5 puntos). La calificación de este instrumento consiste en una
escala sumatoria, de dirección positiva (a mayor resultado, mayor CV), que
puede hacerse en escalas de 4-20 que es comparable con la escala de 0-100,
según la preferencia del investigador; los resultados mayores a 50 (de la
segunda forma), indican una alta percepción de CV por parte de las personas
evaluadas. Sólo tres preguntas del cuestionario son estructuradas en forma negativa
y alusivas a dolor o disconfort, sentimientos negativos y dependencia de la
medicación o de tratamientos. De las 26 preguntas, dos son generales sobre la
valoración global de la CV y la satisfacción con la salud y las otras 24
corresponden a la valoración multidimensional de la CV. Ellas se agrupan en 4
áreas: salud física, psicológica, relaciones sociales y ambiente.1, 21,
44- 46.
2. NSL: La lista de Nürnberg es una
escala de autovaloración del envejecimiento orientada al concepto de
actividades de la vida diaria (AVD) que contiene una cuantificación de
cambios dependientes de la edad con respecto a la vitalidad (estado de ánimo),
rendimiento cognitivo y contactos sociales, proporcionando con ello, en primer
lugar, que los propios interrogados perciban en la cotidianidad los cambios
tempranos típicos de la edad (envejecimiento subjetivo). Y en segundo lugar,
que esos cambios percibidos puedan ser de utilidad como señal o advertencia
temprana al posible desarrollo de patologías cerebrales47. Consta de
20 preguntas de quejas subjetivas, con cuatro alternativas de respuesta, las
cuales son valoradas por los encuestados de 1 a 4 puntos por ítem. La
calificación de la NSL consiste en una escala sumatoria. La puntuación menor o
igual a 55 puntos es óptima, pero un puntaje global mayor de 55 puntos, ya
puede indicar, además de la percepción de los cambios propios de la edad, la
existencia de daños cerebrales32, 47, 48.
Análisis estadístico
Se presentan las características demográficas utilizando la frecuencia y el
porcentaje para las variables cualitativas como: sexo, zona de residencia,
estrato socioeconómico, estado civil y ocupación; la media y desviación
estándar (DE) para las variables cuantitativas como edad y escolaridad medidas
en años. Se compararon los resultados en las pruebas del WHOQOL-BREF y NSL en
los tres grupos de estudio. Para el análisis de resultados en los test de
autovaloración de calidad de vida y del envejecimiento se utilizó el ANOVA no
paramétrico de Kruskall Wallis en la comparación de los tres grupos y la prueba
U de Mann-Whitney para las comparaciones por pares solo sí el resultado previo
del ANOVA rechazaba la hipótesis nula. Se utilizaron pruebas no paramétricas
teniendo en cuenta que las variables de análisis no provenían de una población
con distribución normal, supuesto valorado con la prueba de Shapiro-Wilks
(n<50) y la prueba de Kolmogorov-Smirnov (n>50). El supuesto de
Homogeneidad de varianzas se evaluó con la prueba F de Levene. Se realizó un
ajuste por edad y escolaridad utilizando análisis de covarianza (ANCOVA); sin
embargo, los resultados no evidenciaron un efecto significativo sobre los
resultados en la valoración de la CV. Los valores p<0.05 fueron considerados
significativos para el control del error tipo I. El procesamiento y análisis
estadístico fue realizado en el paquete SPSS versión 14.0®.
RESULTADOS
La tabla1 muestra las características
sociodemográficas de los tres grupos participantes. La edad promedio del grupo de adultos portadores
de la mutación E280A en la PS1, era de 37.3 años (DE 5.3 años), la de los no portadores fue de
43.6 años (DE 7.6 años), y la del grupo de adultos mayores era de 69.1 años (DE 6.3
años). La escolaridad para
los tres grupos fue alrededor de los 8 años (secundaria incompleta), sin
diferencias estadísticamente significativas (p = 0.268). En cuanto al sexo, hubo mayor
participación de las mujeres en el estudio tanto para el grupo de
adultos en edad media como para los adultos mayores (63% en portadores, 76.9%
en no portadores y 85.4% en adultos mayores). Con respecto al lugar de
residencia, la mayoría de los participantes de los tres grupos, residían en la zona urbana, en
los grupos de portadores y no portadores, entre un 7.4% y 7.7% respectivamente
vivían en la zona rural. El grupo de no portadores y los adultos mayores
pertenecían mayoritariamente a niveles socioeconómicos medios (3-4), en cambio,
un poco más de la mitad de los portadores pertenecían a estratos bajos (1-2).
Respecto del estado civil, hubo predominancia de participantes casados o en
unión libre, especialmente de los portadores y no portadores, mientras que para
los adultos mayores los porcentajes más altos los constituyen los viudos,
seguidos de los casados (40.6% y 39.6% respectivamente). La mayoría de los
participantes en este estudio respondió a la categoría de trabajadores no
calificados, de acuerdo con algunas adaptaciones a la clasificación de la
Organización Internacional del Trabajo (OIT), hechas por los investigadores del
estudio, seguida para los adultos mayores de la categoría de jubilados y/o
pensionados.
Se
observan en la tabla 2 los resultados de las escalas de
autovaloración WHOQOL-BREF y la NSL de los tres grupos de participantes, cuyo promedio de autovaloración
de CV en las cuatro áreas del instrumento: salud física, psicológica,
relaciones sociales y ambiente, mostró resultados por encima de 50 puntos, lo
que significa que, en general, valoran bien su calidad de vida.
Específicamente en el área de salud física, los portadores y los no portadores
no mostraron diferencias entre sí, pero los adultos mayores sí mostraron una
autovaloración significativamente menor (p<0.05), comparados con los
primeros, además el tamaño del efecto (TE) propuesto por Cohen49 (1988)
encontrado en salud física para el grupo 1 (portadores) vs. el 3 (adultos
mayores) fue de 0,85 y para el grupo 2 (no portadores) vs. el 3 (adultos
mayores) fue de 1,00.
En la
autovaloración global del envejecimiento medida por la NSL, los tres grupos
mostraron un promedio inferior a 55 puntos, lo cual indica una adecuada
percepción de los cambios propios del envejecimiento. Tampoco se encontraron
diferencias significativas entre portadores y no portadores; sin embargo, los
adultos mayores mostraron puntajes más altos que los demás adultos, con
diferencias estadísticamente significativas. En la NSL el tamaño del efecto fue
de 1,17 para el grupo 1 vs. 3 y de 1,02 si comparamos el grupo 2 vs. el 3 .
Tabla 1.
Características sociodemográficas de los grupos portadores de la mutación E280A
en la PS1, no portadores y adultos mayores. Antioquia-Colombia 2005-2007
Tabla 2.
Resultados en las escalas de autovaloración de WHOQOL-BREF y la NSL de los
grupos portadores de la mutación E280A en la PS1, no portadores y adultos
mayores. Antioquia-Colombia 2005-2007
DISCUSIÓN
Se partió de la hipótesis que el grupo de los
portadores obtendría una baja calificación subjetiva de su CV (podía ser similar a la de los
adultos mayores, quienes ya debían tener cambios del envejecimiento y/o
alteraciones de salud, y menor que la de los no portadores), porque en
particular, pertenecían a familias donde necesariamente uno de los dos padres
ha padecido la EAFP y, por lo tanto, han tenido mayores dificultades de diversa
índole que las familias de los no portadores. También los parámetros objetivos para la medición de la CV
en el grupo de los portadores eran adversos, pues se caracterizó por tener un
grado de escolaridad baja, con un nivel promedio correspondiente a la
secundaria incompleta, quienes además se desempeñaban en oficios no calificados
y, con respecto a la situación socioeconómica, la mayoría eran de bajos
recursos (estrato 1 y 2).
De acuerdo con los resultados de este estudio,
todos los grupos presentaron una puntuación promedio >50 en su CV, lo que indica una valoración
favorable en las cuatro áreas consideradas: salud física, psicológica,
relaciones sociales y ambiente. Sin embargo, fue el grupo de adultos mayores el
que presentó una menor puntuación en el área física, comparado con portadores y
no portadores, la cual fue estadísticamente significativa (p=0.000). Este
resultado es coincidente con los de otros estudios que evidencian que los
mayores tienen más problemas crónicos de salud que aumentan con la edad y que
las puntuaciones subjetivas de bienestar y de salud explican mejor la CV que
los indicadores objetivos económicos y sociodemográficos22 y, por
tanto, es el área de la salud física el concepto más determinante, no el único,
en la escala de valoración de la CV2, 17, 50. “No hay duda de que la
variable salud es la de mayor peso en la percepción de bienestar de los
ancianos y que los déficit de salud constituyen el primer problema para ellos”17.
No se presentaron diferencias significativas en las demás áreas de la CV al
comparar los tres grupos.
Percepción
global del envejecimiento en la NSL, el grupo de adultos mayores fue el que
tuvo una valoración más negativa sobre el envejecimiento50, al
obtener una mayor puntuación promedio del test (42.2 puntos), aunque ésta
indica un rango de condiciones óptimas, resultado que, por tanto, no señaló
alteración de su vitalidad (estado de ánimo), rendimiento cognitivo o contactos
sociales. Éste es un hallazgo esperable, dada la ubicación del grupo en esta
fase del ciclo vital humano, y las diferencias fueron estadísticamente
significativas al contrastar los resultados con los de los grupos de portadores
y no portadores (p=0.000). Otros resultados que podrían incidir en la
autovaloración de la CV en los adultos mayores se relacionan con el estado
civil, puesto que un porcentaje alto de ellos, el 59%, al parecer no tenían una
relación conyugal o afectiva al momento de la evaluación (soltero, separado,
divorciado o viudo), y es bien conocida la importancia de la familia en la
autopercepción de CV51-53. También los resultados en la escolaridad de
los mayores coinciden con otros estudios de CV en diferentes contextos
mundiales, incluso en países desarrollados, donde la mayoría de ellos tienen
niveles educativos de primaria y situación profesional de trabajadores
semicualificados o no cualificados. “El porcentaje de ancianos con nivel primario de escolaridad puede
relacionarse con la etapa que vivieron estas generaciones” 54,
ya que las oportunidades eran menores.
Pero
¿cómo entender entonces la disociación de las condiciones objetivas y
subjetivas de la CV en el caso de los portadores del presente estudio? Primero,
porque “las personas que se consideran sanas tienen una mejor calidad de vida”22
y, de hecho, este grupo, aunque portador, es asintomático. Otra razón puede ser
que CV “cambia evolutivamente en función de factores heredados, aprendidos y de
la libertad que es posible gracias al ejercicio de la voluntad”55.
También la CV, además de requerir buenas condiciones objetivas de vida,
necesita un elevado grado de bienestar subjetivo que incluye un proceso
cognitivo que compara aspiraciones con percepciones y se conceptualiza en
términos de satisfacción con la vida. Para concluir debemos recordar que la
riqueza social no significa CV, tampoco el bienestar material y económico
concuerda con el bienestar subjetivo de satisfacción con la vida o con el
sentimiento de felicidad16.
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
Los
adultos mayores se autovaloraron con menor CV que los portadores y los no
portadores de la EAFP, especialmente en el área de la salud física y en la
percepción del envejecimiento, lo cual concuerda con otros estudios realizados
en la misma temática. La
salud física sigue constituyendo uno de los factores más importantes e
influyentes de la autovaloración de CV y de envejecimiento. Sin embargo,
al parecer, no tiene el mismo efecto en población vulnerable a desarrollar
EAFP, lo que indica que las personas afectadas conservan tal autovaloración por
mayor tiempo, pues al parecer la sobrecarga generada en las familias por la
enfermedad genética no la afecta de manera temprana. Esto puede explicarse
porque los adultos medios o maduros no tienen tantas deficiencias físicas,
cognitivas y sociales como los adultos mayores y por tanto en ellos mejora
sustancialmente la percepción de independencia y autonomía para la realización
de actividades en la cotidianidad.
Las
discrepancias sobre la autovaloración de CV de las personas vulnerables a
desarrollar EA debe ser confrontada con la información de sus familiares o
cuidadores más cercanos, ya que éstos suelen aclarar y complementar
subjetivamente el concepto que se tiene sobre la CV y percepción del
envejecimiento. Las familias de los portadores sufren, además de la tragedia de
la enfermedad, la catástrofe económica cuando uno de sus padres está enfermo en
plena edad productiva, especialmente si es el proveedor económico. El bajo nivel socioeconómico del
grupo de los portadores del estudio debe llamar la atención de las autoridades
gubernamentales y sanitarias para implementar políticas y servicios que
respondan de manera más eficiente y efectiva a sus necesidades,
especialmente en lo referente a la ampliación de los planes obligatorios de
salud, cuyos servicios en salud mental aún son incipientes.
De igual
forma la educación sanitaria, la promoción de la salud, la prevención de la
enfermedad, los diagnósticos tempranos, los tratamientos oportunos y la
orientación del trabajo en equipo interdisciplinario con personas y grupos
vulnerables o enfermos, deberá ser una prioridad esencial para todos los
profesionales, especialmente de las áreas afines como: neurología, psicología,
gerontología, enfermería, trabajo social, entre otros.
Se
recomiendan nuevos estudios que exploren y comprendan mejor los factores por
los cuales los portadores presentan una buena autovaloración de la CV y del
envejecimiento a pesar de las adversidades descritas, y que avancen en la
medición de los componentes subjetivos de CV.
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Recibido: 23 de octubre de 2007. Envío
para correcciones: 29 de febrero de 2008 Aprobado: 26 de marzo de
2008
a)
Investigación financiada por: el Instituto Colombiano para el Desarrollo de la
Ciencia y la Tecnología (COLCIENCIAS) código 111504-16394, contrato 256-2004:
“Evaluación de un programa de estimulación cognitiva para población en riesgo
de Alzheimer y adultos mayores”; con la participación del Grupo de
Neurociencias de Antioquia, Facultad de Enfermería de la Universidad de
Antioquia y del Instituto de Psicogerontología (Universidad de Erlangen-
Nüremberg); estudio realizado en Medellín, Colombia, entre Enero de 2005 y
Junio 2007.
©
2013 Investigación y Educación en Enfermería
Calle 64 Nº 53·09 - Apartado 1226
Tels.: 2106337, 2106335
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Medellín, Colombia
revista@tone.udea.edu.co
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ALZHEIMER ANALISIS
AUTOVALORACIÓN
DE CALIDAD DE VIDA Y ENVEJECIMIENTO EN ADULTOS CON RIESGO DE ALZHEIMER
Se realizó un estudio
descriptivo transversal donde participaron 162 personas asintomáticas en riesgo
de desarrollar Enfermedad de Alzheimer como consecuencia genética o del proceso
de envejecimiento. En el mundo, muchos estudios realizados evalúan la calidad
de vida (CV) y la percepción del envejecimiento en personas adultas y en
poblaciones con enfermedades crónicas. También universalmente se está dando un
cambio en la pirámide poblacional con un aumento de la población adulta mayor y
el incremento de enfermedades asociadas con la edad avanzada, entre las más
comunes se consideran las neurodegenerativas como la Enfermedad de Alzheimer. La
CV en el país se identifica por medio de los estudios económicos y se asocia
con conceptos de pobreza, desnutrición, infraconsumo, bajos niveles educativos,
inserción inestable en la producción, condiciones sanitarias y habitacionales
precarias la CV es un concepto que empieza a incluirse en los documentos
públicos. Envejecimiento activo: proceso por el cual se optimizan las
oportunidades de bienestar físico, social y mental durante toda la vida, con el
objetivo de ampliar la esperanza de vida saludable, la productividad y la
calidad de vida en la vejez, la CV ha sido una aspiración de los seres humanos
en todos los tiempos, pero su imprecisión conceptual desde la objetividad y
subjetividad, hacen que estas dimensiones se valoren de manera diferente de
persona a persona
Algunas
definiciones conceptuales de CV
La OMS en 1994 definió la CV como: “Percepción personal de un
individuo de su situación de vida, dentro del contexto cultural y valores en
que vive, en relación con sus objetivos, expectativas, valores e intereses” describen
la CV como “sucesión de hechos o efectos que tienen como consecuencia un
sentimiento de satisfacción o de felicidad con la vida y consigo mismo” La CV
es parte esencial en el desarrollo de una sociedad la CV como el resultado de
un proceso individual de valoración de muchas dimensiones que interactúan entre
la persona y su entorno, que abarcan tanto condiciones de vida objetivas como
subjetivas, dentro de las cuales se encuentran las normas sociales, las
valoraciones personales y los factores afectivos
Adultos
mayores y cambios del envejecimiento
La adultez es una etapa del ciclo vital humano. El
envejecimiento es un proceso evolutivo normal, universal, acumulativo e
irreversible, constituido por componentes físicos, psíquicos, sociales,
culturales y ambientales. Es la suma de todos los cambios que se producen en el
ser humano con el paso del tiempo, que conducen a un deterioro del
funcionamiento en general y a la muerte. Es la etapa de mayor vulnerabilidad. Es importante
considerar que no todos los cambios funcionales del envejecimiento son enfermedad.
Envejecer es algo tan natural como el paso del tiempo y se trata de una etapa de
la vida de la persona. Los cambios biológicos incluyen los referentes a la
apariencia física. A nivel psicológico, el envejecimiento se asocia a menudo
con una disminución de la capacidad en el rendimiento cognitivo
Adultos
en riesgo de desarrollar EA familiar
Las demencias son afecciones que generan gran nivel de
dependencia en la población adulta.La memoria es una de las funciones más importantes.
La persona enferma de este mal pierde gradualmente su capacidad de elegir,
responder por sus actos y expresar la propia libertad; sus cuidadores trabajan
hasta por más de diez años acompañando a su pariente con inmenso sacrificio
La
importancia del trabajo interdisciplinar
Para mantener la CV de los grupos vulnerables a desarrollar
EA, es fundamental la visión integradora y el aporte comprometido del equipo
interdisciplinario las actividades de enfermería con personas vulnerables a
desarrollar EA se relacionan con la búsqueda de la calidad de vida
Materiales
y métodos
Estudio descriptivo transversal “Evaluación de un programa de
estimulación cognitiva para población en riesgo de Alzheimer y adultos
mayores”, En total se evaluaron 250 personas por neurología y neuropsicología
Instrumentos
- WHOQOL-BREF (World Health Organization Quality of Life): Es un instrumento transcultural, el cual produce un perfil de la CV según la propia percepción de la persona evaluada
- NSL: La lista de Nürnberg es una escala de autovaloración del envejecimiento orientada al concepto de actividades de la vida diaria
Resultados
La edad promedio del grupo de adultos portadores de la
mutación E280A en la PS1, era de 37.3 años, la de los no portadores fue de 43.6
años y la del grupo de adultos mayores era de 69.1 años. La escolaridad para
los tres grupos fue alrededor de los 8 años. En cuanto al sexo, hubo mayor
participación de las mujeres, los tres grupos, residían en la zona urbana, los tres grupos de participantes, cuyo
promedio de autovaloración de CV en las cuatro áreas del instrumento: salud
física, psicológica, relaciones sociales y ambiente, mostró resultados por
encima de 50 puntos, lo que significa que, en general, valoran bien su calidad
de vida.
Discusión
Se partió de la hipótesis que el grupo de los portadores
obtendría una baja calificación subjetiva de su CV, los parámetros objetivos
para la medición de la CV en el grupo de los portadores eran adversos, pues se
caracterizó por tener un grado de escolaridad baja. De acuerdo con los
resultados de este estudio, todos los grupos presentaron una puntuación
promedio >50 en su CV “El porcentaje de ancianos con nivel primario de
escolaridad puede relacionarse con la etapa que vivieron estas generaciones”
Conclusiones
y recomendaciones
La salud física sigue constituyendo uno de los factores más
importantes e influyentes de la autovaloración de CV y de envejecimiento. El
bajo nivel socioeconómico del grupo de los portadores del estudio debe llamar
la atención de las autoridades gubernamentales y sanitarias para implementar
políticas y servicios que respondan de manera más eficiente y efectiva a sus
necesidades
ALZHEIMER
ACTIVIDAD
Te pido de favor que contestes el siguiente cuestionario en
la parte donde dice comentarios te agradezco de ante mano tu participación ya
que tus respuestas nos servirán para ver si has entendido el tema te estaremos
contestando si tu cuestionario acido contestado correctamente
- Menciona que es la enfermedad de Alzheimer
- Menciona 6 signos y síntomas del Alzheimer
- Menciona 3 causas del Alzheimer
- Menciona 2 pruebas o exámenes que se realizan para diagnosticar la enfermedad
- Menciona 3 complicaciones de la enfermedad del Alzheimer
Nuñez Herrera Andrea Izamary